La resolución requería al menos 18 votos para ser aprobada. En la sesión extraordinaria sobre “los últimos acontecimientos en Venezuela”, celebrada este martes 23 de febrero en Washington, cinco países votaron en contra, ocho se abstuvieron y dos estuvieron ausentes.
Mientras la OEA discutía el caso venezolano en la capital estadounidense, las presidentas de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) y el Consejo Nacional Electoral (CNE), Delcy Rodríguez y Tibisay Lucena, respectivamente, confirmaron que la fecha de las próximas elecciones presidenciales será el 22 de abril, como lo propuso el ente plenipotenciario.
“Venezuela seguirá adelante con sus elecciones como bien lo acaba de detallar la presidenta del Poder Electoral (…) Ningún tipo de intervención o injerencismo tiene cabida en nuestro país”, insitió Rodríguez.
Antes de la votación, el embajador de Venezuela ante la OEA, Samuel Moncada, indicó que el país desconocería cualquier decisión acordada en el seno del organismo internacional y denunció un “crimen de agresión del gobierno de Estados Unidos contra el pueblo venezolano”.
La resolución fue promovida por México, Estados Unidos, Argentina, Brasil, Panamá y Santa Lucía. En el texto, los Estados miembro “consideran” que la convocatoria de comicios presidenciales para el 22 de abril “imposibilita la realización de elecciones democráticas, transparentes y creíbles de conformidad con las normas internacionales”.
Por tanto, exhortan al Gobierno de Venezuela a que reconsidere la convocatoria prematura de elecciones presidenciales y presente un nuevo calendario electoral que haga posible la realización de elecciones con todas las garantías necesarias para un proceso libre, justo, transparente, legítimo y creíble”.
Además, piden que las elecciones “incluyan la participación de todos los partidos y actores políticos venezolanos sin proscritos de ninguna clase”, “observadores internacionales” y “un Consejo Nacional Electoral cuya composición garantice su independencia y autonomía”.
La aprobación de esta resolución representa una victoria para el grupo de 14 países liderados por México y EEUU, que el año pasado promovieron una resolución que condenaba la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente y que no pasó porque el bloque caribeño mantuvo su apoyo al Gobierno venezolano.
Fuente: JULETT PINEDA SLEINAN - http://efectococuyo.com
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