(QUINTA VANGUARDIA) Polo con algunas trabas

El momento del líder y el contexto Histórico del actual proceso, requiere de bases sociales de apoyo fuertes, requiere de momentos de protagonismo popular decisivos, requiere de una multitud popular organizada y movilizada tras un proyecto histórico de liberación, construido, labrado por la experiencia de lucha de los actores, movimientos y fuerzas sociales.
Debemos tener presente con certeza absoluta que, a los líderes históricos hay que preservarlos, hay que apoyarlos y protegerlos, pero no hay que elevarlos al “panteón de los semidioses”, no son ni revolucionarias ni sanas las acciones de apoyos automáticos, o considerarlos infalibles. En realidad, los líderes no son ni deben considerarse infalibles, tenemos múltiples ejemplos a partir del Miquilenismo, el general Rosendo, Baduel, y otros cuantos, entre los pasados y actualmente muchos que están en ejercicio de Gobierno pero con el resorte de las traiciones asomándose, que así lo demuestran, a pesar de las tantas advertencias.
La lealtad no debe confundirse con la sumisión incondicional, pues la democracia socialista es la mas alta expresión de autoridad compartida, de autogobierno, de superación de la naturalizada división entre gobernantes y gobernados, y principalmente deben utilizarse las herramientas de todo Revolucionario, vale decir, La Critica y la autocrítica. Los líderes históricos se construyen en y desde el diálogo crítico con el protagonismo popular. No hay mejor apoyo a un liderazgo histórico, que la sustitución de un “pueblo-masa de maniobra”, por un pueblo protagonista de su historia, por una voluntad colectiva con base a su proyecto histórico de liberación, que sustituya el orden histórico de dominación y jerarquía, por la red de cooperación para el trabajo vivo, por la conquista de espacios de lo común en libertad: una asociación de hombres y mujeres libres.
Conformar mas que una Alianza, la unidad de todos los factores y actores, implica en el campo Socialista democrático y Revolucionario, la aplicación del principio de “Unidad en la Diversidad” generando de este modo, esquemas de igualdad necesarios y mas aún prudentes, que permitan la preservación de las individualidades necesarias. Llamar a la unidad, en forma de “Polo”; o cualquier otra, a fin de cuentas Unión de iguales, no puede ser un decreto jerárquico, sin tomar en cuenta algunos planteamientos previos que muy probablemente tienen su razón, política, histórica, Social, etc… y todas ellas absolutamente validas.
Decimos esto a sabiendas que se pueden romper algunos cristales, por que en ese Polo que se inicia hoy, se notaran razonadas ausencias que con expresión crítica pondrán pausa a su sumatoria.
Estemos atentos, elementos de indiscutible peso moral, de indiscutible consecuencia Revolucionaria y más aún precursores de las condiciones que dieron cabida a este proceso, seguramente estarán en discrepancia y será interesante ver el manejo político del líder que nos daría un asomo de madurez, comprensión y humildad… Esperemos que no sea de forma contraria, lo cual daría una mala señal.

Algunos de los Convocados al Polo Patriótico, no están muy de acuerdo de acudir como ovejas a un redil. Habrá críticas y algunas contradicciones “Ojo Pelao”.

Por: Comandante Arocha
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