Los visitantes contaron que cuando se acercaron a los portones de la sede policial, los agentes les negaron el paso. Minutos después de las 7:30 de la mañana escucharon varias detonaciones y explosiones de bombas lacrimógenas.
Está situación provocó angustia entre la gente pues crean que algo malo pasaba dentro de los calabozos.
Algunos lloraban y otros gritaban. Todos se amontonaron en la entrada de la institución para exigir explicaciónes.
Entre gritos, el director de la Policía municipal, supervisor jefe Ronald Padrino, informó a los presentes que la acción respondía a una requisa de rutina, que no arrojó resultados.
Señaló que las inspecciones las harán cada 20 días. Antes sólo supervisaban las celdas cada mes y medio.
Además indicó que se harían tres traslados al Internado Judicial José Antonio Anzoátegui de Puente Ayala, en Barcelona.
La respuesta de Padrino no calmó los ánimos de los familiares, sino todo lo contrario. Con piedras, cauchos y empujones intentaron impedir que se llevaran a los reclusos para la cárcel.
Contra viento y marea
En medio del enfrentamiento entre civiles y uniformados, las autoridades pudieron sacar a cinco reos en una unidad patrullera, custodiada por motorizados.
Tres de los reclusos fueron llevados a Puente Ayala, y el resto sería presentado ante los tribunales.
En la cárcel capitalina ingresaron a Francisco Antonio Pabique Salazar, de 23 años, procesado por robo agravado; a Jhonny José Rodríguez Martínez (24), acusado por el mismo delito y porte ilícito de armas; y a Jhonny José Astudillo Mata (32).
Este último fue detenido por ocultamiento de droga, y tiene una solicitud por homicidio.
Quienes acudieron ayer a la comandancia portuaria denunciaron que, supuestamente, los internos son víctimas de constantes agresiones por parte de los funcionarios.
Un hombre de 40 años, que se negó a suministrar su nombre por temor a que los uniformados ejerzan represalias contra su hijo, dijo que a su muchacho le “sembraron” un facsímil y un celular robado.
“Aquí sólo dejan libre a quien tiene dinero. Mi hijo ya tiene cuatro meses preso”.
Los denunciantes manifestaron que en más de una oportunidad han consignado la queja, por abuso de autoridad, ante la Fiscalía 19, pero siguen sin recibir respuesta.
Exigen a los entes competentes intervenir al organismo policial.
Eran pranes
De acuerdo con la información policial, Francisco Antonio Pabique Salazar y Jhonny José Rodríguez Martínez eran conocidos como los pranes de Poliguanta. Con sus traslados, las autoridades policiales estiman que prevalezca el orden en los calabozos.
19 traslados se han realizado en lo que va de año, desde la Policía de Guanta al Internado Judicial José Antonio Anzoátegui del sector Puente Ayala de Barcelona. Durante esta semana llevaron a seis privados de libertad a la cárcel capitalina.
Fuente: Yeraldyn Vargas R - http://eltiempo.com.ve
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