El mal ejemplo de Manuel Isidro Molina

La campaña electoral dará muchos ejemplos, unos ingeniosos, otros más bien tristes, de candidatos intentando hacer lucir opciones sin esperanza. Unos rifarán operaciones de senos otros montarán historias fantásticas.
Lamentable es cuando se usa un prestigio ya en decadencia para llamar la atención a juro. Está el caso de Manuel Isidro Molina, viejo político-periodista que no ha terminado de dar pie con bola.
Primero inscribió la candidatura como diputado de Leocenis García (sin consultar con el ex preso político si quería ser su abanderado o competir por el distrito Libertador a competir con la jueza Afiuni) para hacer llamar la atención sobre su partido de maletín. Luego montó la historia sobre el cáncer del Presidente, a sabiendas de que en nuestra sociedad del rumor una mentira dicha mil veces podría hacerse verdad… ¡Hasta que la desmienten! Pero claro, logrando al menos hacerse notar en programas de radio y comentarios de prensa, para luego decir… “Tengo mis fuentes”.

No es la primera vez que este fablistán arma historias y rumores para llamar la atención a juro. Decepcionante.

Fuente: http://www.codigovenezuela.com