“Las cuentas de Juan José Levy fueron embargadas en $ 300 millones por irregularidades en exportaciones a Caracas“, señaló hoy viernes 29 de julio el diario argentino, El Clarín. El periodista Daniel Santoro señala en su reportaje que una pelea familiar permitió “descubrir irregularidades millonarias en los negocios entre Argentina y Venezuela”. Detalla que “hasta ahora estaban bajo la lupa de la Justicia en Argentina, las exportaciones de maquinaria agrícola y la valija de Antonini Wilson”.Con este nuevo juicio, se revelan nuevos guisos con “la venta de productos de limpieza e higiene personal y de decodificadores de TV. Por este rubro, el juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky embargó en 300 millones de pesos (argentinos) cuentas del empresario Juan José Levy”, quien detalla el diario, “tiene vínculos con el ex ministro de Planificación Federal y actual diputado del Frente para la Victoria, Julio De Vido, y sobre todo con su ex jefe de Ceremonial y ex espía de la Agencia de Inteligencia Federal (AFI), José María Olasagasti”.
Levy fue uno de los empresarios “que participó de los viajes de Cristina Fernández a Venezuela en el marco de los acuerdos de cooperación estratégica entre ambos países y el fideicomiso argentino-venezolano que maneja la petrolera PDVSA”.
Actualmente la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional investiga el destino de los más de 10 mil millones de dólares que Venezuela entregó a Argentina en distintas operaciones.
Pero no solo destaca este empresario. Según el Clarín, además de Levy, están en “otros casos los hermanos Vignatti en al llamado arrozgate y Pablo Rubio. Aguinsky dictó el embargo luego de que la fiscal Luz María Rivas Diez allanó domicilios de Levy y de las empresas laboratorios ESME, Corporación Gulfos S.A. y Bleu Tel S.A., entre otras, revelaron a Clarín fuentes judiciales. Clarín llamó ayer (28 de julio) al abogado de Levy, Francisco Trovato para tener un descargo de su cliente pero hasta el cierre de esta edición no se había obtenido respuesta”.
Pelea familiar evidenció el guiso
El diario argentino detalla que la causa judicial “se abrió por una extracción de testimonio que envió la jueza en lo comercial Paula Hualde que interviene en una disputa entre Levy y sus tres hermanos por el control de ESME, que incluyó ‘insultos y amenazas’”.
ESME pasó durante el período kirchnerista, “a ser una PYME a una empresa que recibió un contrato por casi 90 millones de dólares para venderle productos de limpieza y de higiene personal a la estatal venezolana Suministros Venezolanos Industriales (SUVINCA). ESME cobró un anticipo del 60 por ciento de ese monto y exportó por 48 millones de dólares. Pero llamativamente a pedido de SUVINCA se suspendieron los embarques de mercaderías hasta nuevo aviso. La Justicia sospecha que ESME facturó sus productos por precios que van ‘de 4 a 10 veces el valor de mercado’. Además, cobró reintegros a las exportaciones por 1.800.000 dólares”.
El otro negocio descubierto a Levy fue el negocio con la venta de decodificadores de TV para Cantv Televisión Satelital, por lo que está siendo investigado por la Aduana “por el intento de exportación de medicamentos con la leyenda gobierno de Santa Fe-distribución gratuita, por 12 millones de dólares a Venezuela y señalado en otro negocio con la ANSeS por el plan Conectar Igualdad”.
El periodista detalla que “el embargo del juez Aguisnky es por la venta de 150 mil decodificadores de China para vender a Venezuela pero pagados con fondos del fideicomiso del gasoil, cuando se supone que debían ser productos argentinos. El contrato, mas las antenas correspondientes, fue por más de 20 millones de dólares. Fue suscrito por Bleu Tel SA y Corporación Gulfos SA -que controla Levy- con la venezolana CANTV”.
Los #PanamaPapers
El negocio de los decodificadores se hizo utilizando una firma offshore abierta mediante la famosa firma panameña que permitió develar guisos mil millonarios. El diario Clarín explica en su reportaje que, además de que se pagó con el dinero argentino-venezolano “una exportación directa de China a Argentina”, destaca que la empresa Gulfos tenga como socio mayoritario a la offshore Frolem Corporation de Nevada, EEUU. Esta empresa, a su vez, “es controlada por Plascot Limited de las islas Seycheles, ambas creadas por el estudio panameño Mossac Fonseca“. Gulfos, según el reportaje, pagó 2 millones de dólares en concepto de “gastos en el exterior por servicios técnicos y profesionales” y usado para ello una telaraña de offshore.
Actualmente la Comisión Permanente de Contraloría de la Asamblea Nacional investiga el destino de los más de 10 mil millones de dólares que el Gobierno del presidente Hugo Chávez le dio al kirchnerismo. Se investiga particularmente el papel de la contraparte venezolana que, “sospechosamente” según el reportaje, “no reclamó por el dinero que pagó a ESMA y que podría servir a esa comisión. Se trata de los representantes de la empresa estatal SUVINCA, Richard Canan, Eddie Elizabeth Betancourt y Vinicio Eusebio Micotti Lanz, entre otros”.
El diario asegura que en la justicia argentina “se descuenta que explicaciones de estos funcionarios venezolanos serían claves para saber si hubo algún funcionario argentino como intermediario de los contratos”. Pero según el acceso a la información oficial a la que ha tenido el diario El Clarín, este y “otros pedidos de cooperación judicial a Caracas no fueron contestados”.
Lea el reportaje de El Clarín AQUÍ
Fuente: Con información de El Clarín - http://efectococuyo.com
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