Diamantino Goncalves |
Meses atrás el comerciante de las apuestas intentó adquirir la edificación donde funcionó el otrora “Club de Playa”, en Lechería (Anzoátegui), al lado del Hotel Punta Palma, por una exorbitante cantidad de dinero en dólares americanos, la cual se negó a pagar a través de una transferencia bancaria, como exigían los propietarios del inmueble. Finalmente no pudo instalar una sala de apuestas donde funcionó el celebre “Club de Playa”. Por otro lado, las conversaciones de Goncalves con Alfredo Carrillo, propietario de la “Marina y Varadero El Morro” de Lechería (antigua Marina INBUCA), no han prosperado, para la instalación allí de una sala de juegos.
Entre empresarios anzoatiguenses causaría extrañeza y sería motivo de especulaciones la disposición de Goncalves a pagar sólo en efectivo y no por vía bancaria, para la concreción de grandes negocios.
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