domingo, 21 de noviembre de 2010

Discriminación en Holanda

Hay quienes opinan que el ascenso al poder de la derecha europea ha generado graves consecuencias, como por ejemplo una escalada de discriminación y racismo en toda Europa. Este sería el caso de Aruba, donde los ciudadanos provenientes de las hasta ahora denominadas Antillas holandesas supuestamente serían discriminados por su origen étnico.
Algunos verían el caso como una posible consecuencia de la total independencia de Curazao y Bonaire.A continuación citamos algunos artículos que ilustran el asunto:


La extrema derecha antimusulmana formará parte del Gobierno de Holanda

Se confirma. La extrema derecha 'se cuela' en el Gobierno de Holanda. La reina Beatriz ha encargado al liberal Mark Rutte, líder del partido VVD, formar gobierno con el partido democristiano CDA y la formación antimusulmana 'Partido por la Libertad' (PVV), encabezada por Geert Wilders, según ha informado el Ejecutivo del país.

"La reina ha recibido a Mark Rutte esta tarde en el palacio y le ha encargado formar gobierno lo antes posible", ha comunicado el servicio de prensa. Poco después, Rutte ha confirmado a los medios que será el Primer Ministro del país.

Los liberales VVD superaron por un escaño a los laboristas PvdA en las elecciones generales celebradas el pasado 9 de junio en Holanda. Lo más sorprendente de los resultados de los comicios fue el espectacular avance que vivió el partido de Wilders, que se convirtió en la tercera fuerza política del país y aspiraba a formar parte del nuevo Ejecutivo.

Sus aspiraciones al fin se han hecho realidad, dado que sus 24 escaños se sumarán a los 52 que totalizan liberales y democristianos, hasta alcanzar la mayoría necesaria para gobernar (76 de los 150 diputados parlamentarios).

El partido de Wilders se ha comprometido a participar en la elaboración del programa de Gobierno, que prevé una reducción de 18 millones de euros en el gasto público hasta 2015 y un endurecimiento de la legislación sobre inmigración.

 Fuente: Afp - http://www.elmundo.es

Un partido xenófobo formará parte del nuevo gobierno de Holanda

Los vientos xenófobos que asolan a Europa se apoderaron hasta de la permisiva y liberal Holanda: el partido anti-islámico de Geert Wilders, el tercero del país, dará finalmente su apoyo a la nueva administración de centroderecha, que por sí sola no podía formar gobierno. Esta es la primera vez que grupos xenófobos declarados acceden al poder en Holanda, y aunque no tendrán un puesto en el gobierno, gozarán de un peso en las decisiones que la mayoría no podrá ignorar.
La decisión política es tan importante que hasta la conservadora canciller de Alemania, Angela Merkel, lamentó la colaboración que prestará el Partido para la Libertad (PVV) de Wilders al nuevo gobierno, para cuya estabilidad desempeñará un papel crucial, pese a no tener ningún ministro. La mandataria recordó el boicot de la Unión Europea en 2000 contra Austria por la entrada al gobierno del Partido Popular de Jörg Haider, de ideas claramente xenófobas.
Después de 111 días de negociaciones para evitar cogobernar con el PVV, grupo que quiere cerrar mezquitas, la coalición conservadora recurrió a Wilders, el verdadero ganador de las elecciones holandesas del 9 de junio pasado, quien el próximo lunes deberá concurrir a los tribunales para declarar en un juicio que se le sigue por incitación al odio racial y discriminación. “Es un gran día para Holanda, habrá grandes cambios (...) participaremos plenamente en las decisiones y nuestro peso se hará sentir, porque tenemos mucho que decir”, declaró Wilders.
El acuerdo gracias al cual el nuevo gobierno podrá comenzar a trabajar después de cuatro meses de consultas fue alcanzado el martes por la noche por los dirigentes de los tres partidos de derecha: el liberal-conservador Mark Rutte, que obtuvo 31 bancas, el cristiano-democrático Maxime Verhagen, 21, y Wilders, 23.
Igualmente habrá que esperar. Si los partidos no hacen grandes objeciones, hoy se presentará un programa que contiene los puntos en que los tres basaron su alianza. El acuerdo de gobierno prevé realizar recortes presupuestarios de hasta 18 mil millones de euros en los próximos cuatro años. Los democristianos celebrarán el sábado un congreso extraordinario para dar el visto bueno o rechazar el pacto de gobierno.
La posición Wilders, de no formar parte del gobierno y sólo apoyarlo en el Parlamento, hace que cuente con una capacidad de influencia cómoda y sin responsabilidades, probablemente con el objetivo de fortalecer su partido de cara a futuros comicios.
Según Meindert Fennema, un politólogo de la Universidad de Amsterdam y autor de una biografía de Wilders, la posición de comodín del político xenófobo le otorga “poder sin responsabilidades”, con lo que el antimusulmán “tiene una libertad enorme. Lo que lo sitúa en medio de un dilema muy favorable, ya que es parte del gobierno y de la oposición al mismo tiempo”.
Los liberales y los democristianos, que suman 52 escaños en un Parlamento de 150, necesitaban a Wilders (23 diputados) para tener una mayoría suficiente en el Parlamento y sacar adelante sus decisiones y propuestas legislativas.
Angela Merkel se quejó en el Bundestag (Cámara Baja del Parlamento) de que “debemos aceptar simplemente que en la formación de los gobiernos de los países soberanos entren partidos que no quieren trabajar por Europa”. El opositor Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) exigió a Merkel que se distancie de los partidos de ultraderecha y antimusulmanes que surgen en distintos países de Europa.

Fuente: http://elargentino.com

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