Víctor Vargas: No se puede venir a Venezuela y pretender atropellar a las empresas

"Este es un triunfo para mi gente". Con esta frase Víctor Vargas hace referencia a la sentencia que el Tribunal 26 de primera instancia de Madrid dio a conocer hace 4 días y en la que obliga al Grupo Santander a devolver al Banco Occidental de Descuento los 150 millones de dólares que dio como adelanto del contrato de compra-venta del Banco de Venezuela hace dos años; operación que no se concretó por la decisión del Gobierno venezolano de adquirir la entidad.
En el despacho de Vargas el teléfono no para de sonar.

"Han sido dos días de muchas felicitaciones, hasta la gente del Santander, cuyos nombres no voy a decir, me han llamado para felicitarme". Los papeles y anotaciones que se apilan en su escritorio dan fe de días ajetreados y de rutinas intensas de trabajo. Los recuerdos familiares se ven por las cuatro esquinas de la oficina. Su hablar rápido revela la euforia por lo que considera el triunfo de una de las "batallas legales históricas en la España contemporánea".

--¿Qué los llevó a tomar la decisión de demandar al Grupo Santander? --En el momento en que el Ejecutivo tomó la decisión de adquirir el Banco de Venezuela, luego de que nosotros lleváramos a cabo la negociación con el Grupo Santander y de que hubiésemos firmado una opción de compra, se planteó el tema de la devolución de los 150 millones de dólares pagados.

El argumentó que esgrimimos desde un principio es que se había generado un hecho de causa mayor, que no era imputable a nosotros en nuestro carácter de compradores porque no estaba en nuestras manos anteponernos a la decisión del Gobierno.

--¿Qué respondió el Grupo Santander?

--La gran sorpresa fue que nos enviaron una comunicación diciéndonos que consideraban que no había motivo para devolver el dinero. Alegaron que se había presentado una situación de riesgo político. Esa fue una manera elegante de informarnos que se estaban apropiando de unos fondos que no les correspondían. No sólo era un monto importante de dinero sino que además nos sentimos atropellados porque nos estaban quitando algo que nos pertenecía conociendo que la operación no se podía realizar.

--Cómo se siente después de que el Tribunal 26 de primera instancia de Madrid decidiera a favor del BOD?

--Lo primero que pensé es que la justicia existe. Eso da confianza porque uno se da cuenta de que en España hay tribunales serios donde ventilan los casos sin ventajismo alguno. Cuando hay que enfrentarse a una pelea legal con un gigante como el Grupo Santander ­que es el tercero más grande de Europa y una potencia innegable en España­ hay que prepararse bien. Contamos con el bufete de abogados español GómezAcebo & Pombo y dentro del equipo de abogados venezolanos estuvieron Alfredo Morles Hernández, Pedro Rendón Oropeza y Ramón José Medina.

--¿Cómo se plantearon el caso?

--Se hizo un plan específico. Estábamos claros en dos cosas. La primera fue que si ganábamos, la sentencia sería histórica en España. Lo segundo es que cuando decidimos demandar ya habíamos agotado todas las vías amistosas para que se nos devolviera el dinero. La respuesta prepotente fue que para ellos era un hecho cumplido y que si queríamos demandar que lo hiciéramos, pero que con seguridad nuestra causa no iba a prosperar. Este es un triunfo de un banco venezolano sobre un gigante español.

--¿Qué lección cree que deja todo este proceso legal para las partes involucradas?

--Fue un proceso de cuatro meses donde declaró gente de mi grupo y del Santander.

Sabíamos que teníamos un caso sólido, pero nosotros no somos dados a estar involucrándonos en demandas porque eso distrae del negocio y quita tiempo. Sin embargo, los resultados han sido un motivo de felicidad para toda mi gente del BOD y de Corpbanca. La reacción de la gente en Venezuela ha sido impresionante. He recibido muchas felicitaciones. En cuanto al Santander, creo que la lección es que no se puede venir a Venezuela y pretender atropellar a las empresas. Yo como venezolano no podía permitir que nos hicieran eso.

--Pero ellos pueden apelar.
--Lo interesante de la sentencia es que se ordena la devolución inmediata de los 150 millones de dólares con los intereses que se generaron en estos 2 años. Esta ejecución es inmediata e independiente de que ellos apelen o no.

--¿Quiere decir que inevitablemente los 150 millones de dólares volverán a ser del BOD?
--Ya lo son. Deben reintegrar los recursos de inmediato.

--¿Cree que con esta devolución de los recursos cesarán los rumores sobre el BOD?
--Estos recursos no son la panacea. Los exigimos porque son nuestros. Sobre los rumores debo decir que son una especie de enfermedad de gente mal intencionada que no da la cara. Todos los bancos hacemos pública la información sobre nuestros estados financieros cada mes; eso no pasa en casi ningún otro país. Pero además nuestros índices de solvencia son los más altos del mundo. BOD y Corpbanca son bancos que están bien calificados al igual que el resto de las instituciones. Las diferencias que pueda haber entre nosotros son sólo en la prestación de servicio.

--¿Piensa que la crisis financiera del año pasado y la caída del Federal contribuyen a generar estos comentarios? --Es evidente que la crisis financiera del año pasado se generó en circunstancias indeseables, pero el sistema se ha purgado y está bien capitalizado. Lo que me causa tristeza es que el esfuerzo que hacemos desde la banca todos los días para prestar servicio de calidad se vea empañado por un comentario en Twitter o en algún portal de Internet de gente sin escrúpulos que fomenta noticias falsas y puede causar mucho daño.

--Se dice que la expropiación de Agroisleña puede crear serios problemas en la cartera agrícola de los bancos.
--Más allá del asunto de Agroisleña, aquí lo que hay que discutir es el tema de las carteras dirigidas, una política diseñada hace más de seis años que hay que reformular. En el BOD y Corpbanca tenemos mucha experiencia en el otorgamiento de créditos agrícolas, porque atendemos a los productores del Zulia y conocemos los ciclos de la siembra y recolección, y el monto total que se necesita para el financiamiento.

Más que porcentajes se deben exigir totales para las carteras de turismo, hipotecaria, agrícola y manufacturera. De esa manera nos hacemos más eficientes y evitamos las multas.

La realidad es que a veces no hay a quien prestarle dinero.

Muy distinto es lo que sucede con la cartera de consumo y comercial que siempre están en crecimiento.

--¿Es negocio para usted tener un banco?
Sí, claro. La prueba es que la Sudeban nos acaba de autorizar un aumento de capital por 450 millones de bolívares y éste es de los pocos incrementos que se han autorizados este año. Además ya estamos en la última etapa de la fusión con Corpbanca, aunque las plataformas están unificadas desde hace ya tiempo. Sumado a esto, estamos proponiendo otro aumento de capital para la última fase de esta fusión en la que sabemos que vamos a crecer mucho.

--¿Vislumbra un proceso de nuevas fusiones en la banca?
--Las fusiones son necesarias para mejorar el servicio.

--¿Si se encontrara en este momento con el dueño del Grupo Santander, Emilio Botín qué le diría?
--Lo miraría a la cara y le soltaría una gran sonrisa. El triunfo legal del BOD me recuerda cuando Venezuela ganó la independencia. Éramos una capitanía general y España un gran imperio y aún así ganamos la batalla.

Los venezolanos tenemos coraje y somos gente valiente que queremos a nuestro país y es esta nación la que debemos defender.

Fuente: http://www.el-nacional.com