Primos Flores piden suprimir testimonios sobre la Farc y alias “El Sentado”

Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas cumplirán, en menos de dos semanas, un año tras las rejas de una celda en el Correccional Metropolitano de Nueva York. Será entonces, el 7 de noviembre, cuando acudan una vez más ante la presencia del juez Paul A. Crotty, esta vez para iniciar un juicio cargado de aristas que apuntan hacia los más diversos ámbitos, desde elementos políticos, informantes desprestigiados, otros asesinados, y hasta las mismísimas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc).

Estas dos últimas variantes destacan en la lista de peticiones que la defensa de los Flores ha extendido a la Corte, con la finalidad de controlar todo aquello que pueda perjudicar la imagen de los acusados ante el jurado que decidirá el destino de los dos venezolanos. El caso se encuentra en el período que antecede el juicio, donde las partes presentan sus petitorios al Juez para que este decida sobre ellos.

Así, la defensa ha exigido, por ejemplo, se limiten las medidas de seguridad durante el juicio y que los acusados vistan ropa común y no el uniforme de la cárcel, con la finalidad de que el jurado no tenga una predisposición negativa hacia ellos. De igual forma, la defensa solicitó incluir unas preguntas en el cuestionario para la selección de los jurados con el propósito de descartar a aquellos que se crea tengan una percepción sobre la culpabilidad o no de Campo y Flores.

Pero la petición más importante fue añadida el pasado 20 de octubre. “De conformidad con las Reglas Federales de Evidencia 403 y 801, los acusados Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas (los “Demandados”) solicitan respetuosamente que esta Corte impida la introducción de una supuesta referencia a las Farc en los testimonios post-detención de los acusados y las declaraciones de oídas de los informantes del Gobierno, particularmente las hechas por el individuo señalado como CW-1, alias El Sentado, quien fue asesinado”.

Con las Farc ni a la esquina

Argumenta la defensa que las Farc no tenían ningún papel real en la supuesta conspiración y tampoco existen alegatos de que los acusados sean miembros o socios de la organización criminal. “Cualquier valor mínimo probatorio de una referencia a las Farc, por tanto, carga la posibilidad de un perjuicio injustificado a los demandados”, cita el texto legal.

La solicitud de supresión por parte los bufetes defensores de los intereses de Campo y Flores se refiere a los testimonios que estos ofrecieron durante el vuelo que tomaron con destino a Nueva York, bajo la custodia de los agentes federales de la DEA y que El Pitazo reseñó el pasado 23 de julio. El agente especial de la DEA, Sandalio González, interrogó a Efraín Campo Flores y a Franqui Francisco Flores de Freitas durante el vuelo, que duró alrededor de cuatro horas.

El primero en testificar fue Campo, quien ofreció detalles sobre la presunta participación en la conspiración durante un interrogatorio que duró más de dos horas. Dijo que la droga que iba a ser trasladada a EEUU sería suministrada por alias “El Gocho”. “La droga se la da (a alias “El Gocho”) las Farc. Yo sólo me reuní con él cinco veces”, confesó.

De acuerdo a lo que se ha hecho público sobre el caso, este sería el testimonio que la defensa pide se suprima de los registros que le serán entregados al jurado durante el juicio. “Es posible que existan otros testimonios que involucran a las Farc y que no han sido revelados a la opinión pública”, comentó a El Pitazo un ex agente federal antinarcóticos radicado en Nueva York.

Preocupa particularmente a la defensa que el jurado – los doce integrantes de la sociedad newyorkina – puede saber que desde el año 1997 el Departamento de Estado de EEUU designó a las Farc como una “organización terrorista”. “La decisión del Gobierno de resaltar este hecho pone de relieve la preocupación de los demandados en cuanto a la admisión indebida de pruebas relacionadas con las Farc. Hay evidencia de que los acusados jamás conocieron ni hablaron con nadie asociado con esta organización”.

La defensa justifica la petición en el hecho de que el jurado ha sido expuesto a noticias que se publicaron en fechas recientes relacionadas con esta organización criminal, “entre ellas un serial de trabajos del diario The New York Times, como consecuencia de las negociaciones de paz entre la guerrilla y el gobierno colombiano y el otorgamiento del Premio Nobel de la Paz al presidente de Colombia, Juan Manuel Santos”. También cree la defensa que podría creerse que “los acusados estarían relacionados con hechos de terrorismo”.

“El Sentado” está muerto y con él su testimonio, según la defensa

El otro petitorio de la defensa apunta a la eliminación de todos los testimonios, informaciones o evidencias ofrecidas por el informante de la DEA conocido en el caso como “CW-1” o alias “El Sentado”, de quien El Pitazo, en un trabajo exclusivo, reveló su identidad el pasado 28 de julio. Se trata de Carlos Amílcar Leva Cabrera, un narcotraficante con casos pendientes en EEUU y que se encontraba en negociaciones informales con la justicia de ese país para aliviar el peso de su posible condena. Mientras cooperaba con los agentes de la DEA en este caso, fue asesinado en su país el pasado 4 de diciembre de 2015, en la ciudad de Santa Cruz de Yojoa.

El testimonio de Leva Cabrera (alias “El Sentado” por sufrir una discapacidad que le confinó a una silla de ruedas), cobró especial interés por la publicación de una fotografía que mostraba a los sobrinos Flores en una reunión en Honduras para definir los detalles de una operación de narcotráfico.

“El Sentado no era un co-conspirador y cualquier declaración hecha por él, incluyendo una declaración que resume supuestas declaraciones de los acusados, sería un testimonio a oídas e inadmisible sin excepción”, argumenta la defensa.Se cita específicamente el interrogatorio al que fue sometido el agente especial de la DEA, Sandalio González, durante la audiencia de supresión que se realizó durante los días 8 y 9 de septiembre pasado.

Pregunta: ¿Está Usted familiarizado con la investigación de los dos acusados en este caso?

Respuesta: Sí

Pregunta: ¿Cuándo comienza la investigación?

Respuesta: A finales de septiembre me contactó un cooperante de los acusados indicando que había unos individuos que querían enviar unos aviones a Honduras

Pregunta: ¿Dijo este cooperante de los acusados algo sobre el propósito de ese envío?

Respuesta: Ellos quieren llenarlos de cocaína

Los demandados no se opusieron a este testimonio durante la audiencia pasada porque no se trataba de decidir su inocencia o no, como ocurrirá en el juicio. “La admisión de dicho testimonio sería tremendamente inadecuada. CW-1 no podría declarar porque falleció; en consecuencia, el agente González no puede testificar en cuanto a lo que CW-1 supuestamente le dijo. Cualquier declaración que indique directa o indirectamente lo que CW-1 le dijo al agente González es un testimonio a oídas, es un rumor y por ello se solicita su supresión en el juicio”.

Dice además la defensa que “los acusados niegan los argumentos del Gobierno en torno a los orígenes de la investigación y la confidencialidad de los informantes con los demandados. La manera en que comenzaron estas interacciones es uno de los problemas más críticos en el juicio. La Corte debe impedir cualquier intento de ir más allá de estos límites impuestos por las Reglas Federales de Evidencia”.

Fuente: Con información de Fiorella Perfetto - http://elpitazo.com